domingo, 24 de octubre de 2010

Pequeños grandes momentos

Hoy Bucarest nos está regalando un espléndido día de sol. Es domingo y nos dimos más tiempo para "remolonear" en la cama y después Lorenzo y yo decidimos coger los bártulos para desayunar y hacerlo en la calle. Se estaba de lujo y el sol calentaba a base de bien.
La portera de nuestro edificio se "escojonaba" de nosotros y hasta se animó a compartir un tazón de café, aunque sólo habla rumano hemos podido entendernos.




Aunque después tocó limpiar a fondo la habitación, lavar la ropa, etc., pero esta tarde es nuestra.

2 comentarios:

  1. Hola guapo!!! Te veo fenomenal, estás muy guapo y se te ve feliz. Espero que aproveches todo al máximo porque el tiempo pasa volando, y si tenemos un finde libre, iremos a visitarte.

    Besos
    Mariu

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